Guardó la calma, respiró. Intentó mantener la mente fría y en blanco y actuar con total normalidad mientras sus pasos lo llevaban hasta la mesa donde estaba cenando. Llegó a ella, le dedicó una pequeña sonrisa a su acompañante y se sentó.
- ¿Sabes? – dijo Jon mientras observaba cautelosamente como se sentaba su compañero – me han dicho que tengo que matarte
Sonrió levemente, con cierto aire de cinismo y picardía.
El rubio le dedicó una mirada consternada y un leve levantar de su ceja derecha.
- Qué casualidad… yo también a ti
Hoy blogspot me odia con los formatos..
ResponderEliminaromg,me gustó el fragmento :B
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